Dedicamos nuestro poema de Diciembre a otro gran poeta andaluz del 27, el genial Federico García Lorca.
Es un poema sobre la Navidad de su obra más compleja, Poeta en Nueva York, considerado por algunos expertos como el poemario más importante de la lírica española del siglo XX.
Lorca escribe este libro durante una estancia en la Universidad de Columbia. Desde su llegada a Nueva York, queda sobrecogido por la deshumanización de la gran ciudad, que recorre, observa y describe magistralmente.
El poeta pasó allí las fiestas de Navidad de 1929-1930 y dedica un impactante poema a esta festividad.
Que lo disfruten.
Calles y sueños
Nacimiento de Cristo
Un pastor pide teta por la nieve que ondula
blancos perros tendidos entre linternas sordas.
El Cristito de barro se ha partido los dedos
en los tilos eternos de la madera rota.
¡Ya vienen las hormigas y los pies ateridos!
Dos hilillos de sangre quiebran el cielo duro.
Los vientres del demonio resuenan por los valles
golpes y resonancias de carne de molusco.
Lobos y sapos cantan en las hogueras verdes
coronadas por vivos hormigueros del alba.
La luna tiene un sueño de grandes abanicos
y el toro sueña un toro de agujeros y de agua.
El niño llora y mira con un tres en la frente,
San José ve en el heno tres espinas de bronce.
Los pañales exhalan un rumor de desierto
con cítaras sin cuerdas y degolladas voces.
La nieve de Manhattan empuja los anuncios
y lleva gracia pura por las falsas ojivas.
Sacerdotes idiotas y querubes de pluma
van detrás de Lutero por las altas esquinas.
...oooOOOooo...
Aquí tienes una versión del poema cantada por Victor Manuel.
Que bien
Es un poema sobre la Navidad de su obra más compleja, Poeta en Nueva York, considerado por algunos expertos como el poemario más importante de la lírica española del siglo XX.
Lorca escribe este libro durante una estancia en la Universidad de Columbia. Desde su llegada a Nueva York, queda sobrecogido por la deshumanización de la gran ciudad, que recorre, observa y describe magistralmente.
El poeta pasó allí las fiestas de Navidad de 1929-1930 y dedica un impactante poema a esta festividad.
Que lo disfruten.
Nacimiento de Cristo
Un pastor pide teta por la nieve que ondula
blancos perros tendidos entre linternas sordas.
El Cristito de barro se ha partido los dedos
en los tilos eternos de la madera rota.
¡Ya vienen las hormigas y los pies ateridos!
Dos hilillos de sangre quiebran el cielo duro.
Los vientres del demonio resuenan por los valles
golpes y resonancias de carne de molusco.
Lobos y sapos cantan en las hogueras verdes
coronadas por vivos hormigueros del alba.
La luna tiene un sueño de grandes abanicos
y el toro sueña un toro de agujeros y de agua.
El niño llora y mira con un tres en la frente,
San José ve en el heno tres espinas de bronce.
Los pañales exhalan un rumor de desierto
con cítaras sin cuerdas y degolladas voces.
La nieve de Manhattan empuja los anuncios
y lleva gracia pura por las falsas ojivas.
Sacerdotes idiotas y querubes de pluma
van detrás de Lutero por las altas esquinas.
Que bien
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